Muchos italianos lo sufren. Ser intolerante a la lactosa no es más que la incapacidad de digerir el azúcar en la leche. En este sentido, cuando se descubre que se es alérgico, es necesario seguir una dieta adecuada. Aquí está la lista de alimentos a evitar.
Cuando eres intolerante a la lactosa, debes evitar ingerir productos como mozzarella y leche. Por lo general, se toleran bien cantidades moderadas de yogur y quesos curados. En este sentido, cada persona puede controlar los síntomas de la intolerancia a la lactosa a través de una cuidadosa elección de alimentos.
Cuando se desata una alergia alimentaria, los primeros síntomas son: astenia; cólicos, calambres abdominales; diarrea amarilla; dolor abdominal; flatulencia; hinchazón abdominal; extrema delgadez; náuseas; estómago hinchado.
Según algunos estudios, la intolerancia a la lactosa en adultos es muy común, en ambos sexos: en los Estados Unidos, hasta un 22% de los adultos padecen deficiencia de lactasa, mientras que los norteuropeos tienen la prevalencia más baja (alrededor del 5%). En Europa central, la prevalencia es de aproximadamente el 30% y en Europa del sur roza el 70%.

La aparición de los síntomas también depende del alimento asociado; si se ingiere lactosa junto con carbohidratos (especialmente carbohidratos simples), que aumentan la velocidad de vaciado gástrico, los síntomas son más probables o más intensos, mientras que si se ingiere con grasas, que reducen la velocidad de vaciado gástrico, los síntomas pueden ser muy reducidos o incluso inexistentes.
Lista de alimentos a evitar
Para evitar consecuencias y síntomas graves, es recomendable comenzar una dieta que excluya ciertos alimentos. Lo que debes hacer para eliminar la intolerancia a la lactosa es verificar las etiquetas de los alimentos y evitar cualquier fuente de lactosa presente en cualquier alimento. Si alguna de estas palabras está enumerada en la etiqueta de un producto, significa que el producto contiene lactosa: leche; lactosa; cuajo, suero de leche; margarina; crema agria.

Para aquellos que no pueden prescindir de la leche, existen tipos de leche que pueden ser asimilados más fácilmente por el intestino, como la leche de vaca o la leche de cabra. La nata para montar contiene cantidades elevadas de lactosa. Sin embargo, al consumirse siempre en pequeñas cantidades, a veces puede ser bien tolerada.
Los quesos blandos como el Brie y los quesos semiduros solo contienen trazas de lactosa y, por lo tanto, son bien tolerados. ¿Algunos ejemplos? Los quesos semiduros, como el Fontina y el Asiago. El Emmental y los quesos extraduros como el parmesano o el grana padano no contienen lactosa y, por lo tanto, pueden ser consumidos incluso por personas intolerantes sin ninguna precaución.
Ten cuidado con los productos horneados que contienen lactosa. Lo mismo ocurre con las galletas, las tortas envasadas, los pasteles y los productos de repostería. También se deben evitar salsas preparadas y caldos.