Las semillas de esta fruta nunca deben ser consumidas. Esto es lo que le sucede a tu cuerpo si las ingieres. Presta atención a lo que ingieres.
Mira estas semillas en la fotografía: ¿reconoces a qué fruta pertenecen? Te adelantamos que es una de las más queridas y consumidas. Sin embargo, precisamente sus semillas dañan nuestro organismo. Por eso nunca debes comerlas.
Semillas y alimentación: cuáles consumir y cuáles evitar
Las semillas ahora forman parte de nuestra alimentación. Definidas como «superfood», entran en esa categoría de nutrientes de los que nunca debemos prescindir.

La mayoría de ellos son ricos en proteínas, vitaminas, grasas saludables y otras sustancias beneficiosas que ayudan al organismo a estar bien. Sin embargo, hay otros que no deberían ser ingeridos porque son peligrosos para nuestra salud.
Algunos estudios científicos han demostrado que estos alimentos de origen vegetal aportan muchos beneficios, aunque no se pueden considerar como un sustituto alimenticio, sino más bien como un complemento nutricional importante.
Entre las semillas que podemos incorporar en nuestra dieta, se encuentran por ejemplo las de calabaza. Un increíble suplemento natural, son una de las fuentes proteicas más importantes del reino vegetal, recomendadas especialmente para aquellos que siguen una dieta vegana o vegetariana.
¿Alguna vez has probado las semillas de amapola? Excelentes en leche, yogur o para hacer postres dietéticos, son ricas en calcio, un mineral esencial para proteger los huesos, los músculos, el corazón y los dientes.
También las semillas de chía tienen propiedades increíbles. Ricas en fibra, son una fuente de proteínas vegetales, perfectas para regularizar el intestino. No podemos olvidar en nuestra lista las semillas de cilantro, que según algunas investigaciones parecen ser capaces de proteger y fortalecer el sistema inmunológico.
Estas son algunas de las semillas que podemos incorporar en nuestra alimentación y que son beneficiosas para el cuerpo. Sin embargo, hay otras que no deberían ser ingeridas.
Estas semillas de fruta nunca deben ser ingeridas: aquí está el porqué
Mira atentamente la fotografía que se encuentra arriba. ¿Reconoces estas semillas? ¿Sabes a qué fruta pertenecen? ¿Las has comido alguna vez? Si la respuesta a estas 3 preguntas es afirmativa, te decimos que has puesto en riesgo la salud de tu cuerpo.
Si en cambio no tienes idea de qué semillas se trata, te lo decimos nosotros: ¡son las de las manzanas! ¿Cuántas veces has consumido esta fruta deliciosa y sabrosa y accidentalmente también has ingerido sus semillas? Probablemente muchas. Sigue leyendo para descubrir por qué ya no deberías hacerlo.

¿Cómo es posible que las manzanas, consideradas desde siempre como la fruta de la salud, estén llenas de semillas peligrosas? Aquí está la respuesta. Las semillas en cuestión son ricas en una sustancia, la amigdalina, que es precursor del cianuro, el cual, como bien sabes, es tóxico e incluso letal. Esta es la razón por la cual ingerir una cantidad excesiva de estas semillas podría representar un riesgo para la salud.
Pero ¿cuáles son las cantidades peligrosas? Según algunos estudios científicos, es necesario ingerir 170 gramos de semillas para comenzar a experimentar algunos efectos secundarios como dolores abdominales, náuseas y dolores de cabeza persistentes. Aunque es bastante difícil consumir todas estas semillas, es igualmente desaconsejable comerlas incluso en pequeñas cantidades.
Para que se produzca una intoxicación, es necesario masticar y consumir 4300 semillas, una cantidad enorme que supone una posibilidad remota de que esto suceda, pero no por ello imposible.
No solo las manzanas contienen amigdalina, también hay otras frutas muy queridas por todos que contienen esta sustancia tóxica como albaricoques y melocotones. ¡También ten cuidado con las semillas de pera! Estas últimas, si se ingieren, en contacto con las enzimas del estómago pueden producir cianuro.
Por lo tanto, debes diferenciar entre las diversas semillas disponibles en el mercado y las que se encuentran naturalmente en las frutas. Siempre ten cuidado con lo que llevas a la mesa y especialmente con lo que ingieres. Mientras que algunas semillas son realmente un superalimento, otras representan un peligro que no debemos subestimar para nuestra salud.
No excluyas de antemano las semillas de tu plan nutricional. Lo único que tienes que hacer es simplemente aprender a distinguir las que son comestibles y saludables, de las que causan intoxicación y envenenamiento.